En el mundo del animé existen variados tipos de temáticas, cuyas fórmulas son repetidas pero cuyos matices cambian a gusto del autor. Entre estos temas se encuentra el género de las apuestas, historias que buscan ser realistas donde sus protagonistas arriesgan todo lo que tienen para salir de un problema al que entraron sin darse cuenta de las posibles consecuencias. Estas historias buscan ser un reflejo de nuestra sociedad, donde existe una total dependencia al dinero para lograr una estabilidad social, presentándonos ambientes pesimistas y una eterna desesperación de sus protagonistas frente al temor de perderlo todo (demás está decir que series fantasiosas de este tipo como No game no life no tienen cabida aquí). Como ejemplo de esto tenemos series como la clásica Kaiji, o el manga y dorama Liar Game. Sin embargo, hoy hablaremos de una serie que cambia completamente la forma de presentarnos esta realidad y la actitud de su protagonista para afrontar ésta: Kakegurui.
La historia de Kakegurui transcurre en la academia privada Hyakkao, destinada a estudiantes de la clase privilegiada de Japón quienes, bajo el yugo del Consejo Estudiantil presidido por la presidenta Momobami Kirari, crean un sistema jerárquico basado en donaciones y apuestas, dejando a quienes no pueden cumplir estas exigencias bajo la nominación de “mascotas”, seres inferiores y discriminados por el resto del estudiantado.
El ingreso de una nueva estudiante, Jabami Yumeko, no pasa inadvertido en las aulas una vez que gana su primera apuesta en un juego retorcido y lleno de trampas; atrayendo hacia ella a más jugadoras, ocasionando un caos en el estatus quo que se mantenía hasta ese momento.
Arriesgándolo todo para ganar.
Jabami Yumeko, sensual y adicta a las apuestas, [Spoiler; Perteneciente a una de las ramas de los Momobami] al perder a sus padres su hermana mayor enferma debe hacerse cargo de una cuantiosa herencia, siendo esta una posible razón a su adicción a las apuestas y su osadés en situaciones de riesgos.
Momobami Kirari, presidenta del Consejo estudiantil, maneja a una de las familias más importantes y prestigiosa de Japón, al contar con tantos recursos, reproduce dentro de las paredes de la Escuela un sistema Capitalista, donde tus recursos marcan tu posición.
Saotome Mary, estudiante de segundo año de Hanagumi y compañera de clases de Yumeko. Sobresaliente dentro de su clase, por sus habilidades en las apuestas, mantiene gran parte del control sobre sus compañeros por las deudas que mantienen con ella, hasta que decide jugar contra Yumeko, perdiendo su posición y pasando a ser mascota. Solo bajo estas circunstancias comprende el verdadero sistema que mantiene la Presidenta, bajo renovadas convicciones siendo una chica mucho más perspicaz, mostrando su inteligencia y habilidad en conjunto con Jabami.
Ikishima Midari integrante del Consejo Estudiantil, es sadomasoquista, es decir, tiene un comportamiento sexual en cual la persona experimenta excitación y satisfacción mediante el sufrimiento físico o psíquico que inflige a otra persona o, como en este caso, recibe de ella.
Tal dijimos en un principio, el tema de esta serie son las increíbles jugadas y apuestas en las que participa Yumeko, sin embargo, el autor de la serie le da su propio toque. Si bien, la serie mantiene ese suspenso y la, a veces, estresante emoción de ver a los protagonistas al borde del precipicio, esta serie en particular es mucho más colorida que otras de su tipo. El director juega con matices de colores fuertes, música estimulante y actuaciones agitadas de sus personajes, quienes, a pesar de sufrir por los posibles riesgos de sus acciones, también disfrutan y saborean, de una forma explícitamente erotizada, sus victorias.
Sin embargo, aunque la serie pinte de “color de rosa” las situaciones y el mundillo en el que se desarrolla, esta no es para nada ajena a la realidad. El sistema Capitalista, donde la acumulación de capital es la condicionante para tener éxito en la sociedad, es preponderante en casi todo el globo, y quienes se nieguen a aceptarlo simplemente tienen que ver la peor cara de este.
"Vamos, apostemos..."
Al igual que en la serie, en nuestra sociedad quien tiene más recursos es quien tiene mayor influencia y poder, y en consecuencia puede hacer y deshacer a su antojo. Pero, a diferencia de la realidad, el mundo en el cual se desarrolla la serie es posible de ser cambiado con mucha más facilidad pues, a pesar de que en un comienzo los estudiantes se encuentran enajenados por el poder y las trabas que, sin darse cuenta, fueron puestas por el Consejo Estudiantil, la llegada de Yumeko revela, de una manera lúdica, la fragilidad del sistema en que se encuentra inmersos.
Otro tema interesante es la forma en que se nos presenta la meritocracia, esto es, lograr una posición en base al esfuerzo y aptitud que hagan a un individuo merecedor de este. En el mundo de la serie existe el llamado “Juego Oficial”, una oportunidad única que tienen las “mascotas” para retar a un miembro del Consejo y librarse de su posición. Esto, a diferencia del mundo real, pone a dos personas con posiciones de poder radicalmente diferentes en una batalla en igualdad de condiciones (hasta cierto punto pues, tal como vemos en la serie, el que tiene la billetera más grande siempre tendrá una posición de ventaja), dejando en evidencia que la posición de un individuo en determinado puesto no es razón de que otros que se encuentre “por debajo de su nivel” sean necesariamente más débiles, o que su situación de privilegio sea incuestionable.
Una lucha por el poder.
Por otro lado, la serie también nos presenta su propio sistema de esclavitud, los llamados “Planes de vida”, situaciones en las que los alumnos, al acumular grandes deudas, se ven obligados a seguir una hoja de ruta creada por el Consejo Estudiantil, de las cuales no pueden hacer queja alguna, con el fin de poder solventar sus deudas. Lo anteriormente descrito, desgraciadamente, tampoco se aleja de la realidad ya que, tal como los estudiantes que son obligados a cumplir con lo que se les manda para poder pagar sus deudas, las personas que no son capaces de retribuir sus deudas se encuentran obligadas a realizar lo que sea necesario y a su alcance, sin la posibilidad de elegir, para poder pagarlas.
El punto fuerte de la animación se encuentra en los mismos personajes al momento de jugar, se le da mucho énfasis a los rostros de los personajes y sus expresiones, por lo cual muchas veces nos encontramos con actuaciones histriónicas que buscan reflejar las verdaderas intenciones y sentimientos de los jugadores. En el caso de la protagonista, Yumeko, al ser una adicta a las apuestas, tenemos escenas erotizadas en el clímax de las apuestas. La mayoría de los personajes que se mueven en este anime corresponden a mujeres, atractivas e increíblemente hábiles en las apuestas, cada una con un objetivo que las motiva a ser apostadoras.
Sin embargo, al dar énfasis en la animación de los personajes se ven sacrificados otros aspectos como lo es la ambientación. La historia se desarrolla casi en su plenitud en la academia privada Hyakkao, aunque es una escuela bastante grande, con muchas habitaciones y escenarios distintos, es notoria la falta de dedicación a este aspecto de la serie.
La apertura quedo en manos de Tia, cantante y compositora J-pop que nos presentó un atrayente jazz titulado “Deal with the Devil” muy afín con la personalidad de Yumeko, un acorde animado y una letra que hace referencia al mundo de las apuestas; Tia ha realizado otros singles en cierres como “Nirvana” de Noragami Aragoto, “The glory days” de Captain Earth y en conjunto con Supercell en el cierre “Heart Realize” de Noragami (todos esplendidos). El opening es una referencia a la academia como una gran pecera en la cual Yumeko disfruta devorar a sus contrincantes mientras avanza por la mesa hacia su contrincante final, uno a uno vamos viendo a los personajes y los juegos con los que participan, por lo cual tendrán un papel protagónico en algún punto de la serie.
El tema de cierre es más simple, con acordes más reiterativos, llamado “Layon the line” de D-selections, banda de J-pop que debutó el 2016 con el opening “Bloodred” en el anime Hundred, muy distinto en estilo. Dejando de lado la música del video de cierre, nos encontramos con Yumeko en una caminata llena de confianza, sensualidad y provocación hacia la victoria.
Kakegurui es una serie que, si bien busca presentarnos nuevos y divertidos juegos como todas las de su género, también nos muestra, de una forma implícita, los vicios de nuestra sociedad. No busca restregarnos en la cara todo aquello que podría estar mal en nuestra realidad, sino que hace paralelismos e invita a reflexionar a sus espectadores, nos muestra situaciones que pueden parecer inverosímiles pero que, si somos capaces de atar cabos y hacer las comparaciones necesarias, nos revela que lo que se nos presenta no pareciese ser tan descabellado.
¿Cuál es el valor de tus ambiciones y hasta qué punto estas dispuesto actuar para cumplirlos?
Escrito por Feña Contreras
